jueves, 10 de noviembre de 2011

Mira...

Sabes qué?
a veces, te darás cuenta de que la vida, te putea, te hace pensar que no debería ocurrir, de echo, no debería pasar, te hace llorar de dolor, de rabia, injusticia... te hace poco a poco, que te vayas distanciando de la gente que conoces, por que, al no saber como te va a atacar, te da miedo, te hace no fiarte de nada, ni de nadie, te hace pensar que eres débil y que no sabes afrontar las situaciones con la debida madurez que debería, te hace mirarte al espejo y decepcionarte a ti mismo, tu cara, tu forma de vestir, tu forma de ser, de pensar, tú en sí mismo...
Llegas a un momento, en el que, simplemente, la vida no vale, no te gusta, no la quieres... entonces, alzas la vista, y miras a tu alrededor, y ves a ese amigo o amiga que están ahí siempre, haciendo un poco más llevadero el día, sigues mirando un poco más adentro y ves, esa persona que te levantó, que con un beso, te dio ganas de mirar un poco más al fondo, que más de un dolor de cabeza dio, pero te siguió en el camino más duro que había pasado alguien al lado tuya, estuvo ahí y no obligado, si no por que te quiere, y necesita tanto como tú que estéis juntos, te ayuda, y te enseña a ir muy despacio, te enseña a caminar juntos, y lo mejor es que te gusta, ya no quieres correr, quieres ir a su ritmo, quieres estar con él y que él te marque un paso lento, y entonces ellos te ayudan a todo, te cierras en banda, no miras más hacía delante, pero es que, atrás hay gente gritando, gritando fuerte, muy fuerte... pero tú no quieres escuchar, entonces una de esas personas te coge del brazo y te tira fuerte, y ahí están los que han estado siempre de verdad, echándote de menos y tú sin ni siquiera darte cuenta de que están ahí, y de que te necesitan...y tú, siendo la persona más egoísta del mundo estabas solo mirando hacía delante, pides perdón y les dices, eh, tranquilos, siempre estuve aqui...

No hay comentarios:

Publicar un comentario